Otra forma de mirar el Black Friday por parte de los trabajadores de Walmart

Esta jugada del marketing, para incitar al consumismo, tiene varios aspectos, cuanto menos, controvertidos.
Además, de que se puede relacionar con un origen esclavista, ya que el día después de Acción de Gracias, los traficantes de esclavos negros bajaban sus precios de cara a la temporada de invierno, ligarlo a un acontecimiento de la creación de la patria estadounidense, que ya no tiene descendientes de sus primitivos habitantes, o estar en contradicción el consumismo (y las rentas) con la sostenibilidad, hay otros elementos que nos debieran hacer pensar. Pongamos el ejemplo del director de Walmart, la principal cadena de distribución estadounidense y el maltrato a sus trabajadores, habitual en otras empresas estadounidenses, no tan lejano de las derivas que se pueden hacer en otros países, incluyendo España..Doug McMillon, su Director, tiene 23.6 millones de razones para estar agradecido este año. Y eso es porque el año pasado, el director ejecutivo de Walmart, se llevó a su hogar: Un salario base de más de un millón de dólares, Adjudicaciones de acciones por valor de más de 15,5 millones de dólares, y aproximadamente otros 7 millones en pagos por de incentivos y otros ingresos, lo que eleva su compensación total en el año 2018, 23.6 millones de dólares.
Pero aquí hay algunos platos de acompañamiento que probablemente no estarán en la mesa de Acción de Gracias de McMillon: No habrá pagos por trabajo en días festivos para ninguno de los 1.1 millones de trabajadores de Walmart por contratos por hora (Walmart eliminó el pago de feriados en 2016).
Ningún seguro médico proporcionado por el empleador para los aproximadamente 500,000 trabajadores a tiempo parcial de Walmart*.
Ausencia de licencia parental remunerada -maternidad o paternidad- para los aproximadamente 500.000 trabajadores a tiempo parcial de Walmart*.
Ocupa el segundo lugar entre las mejores tiendas departamentales y de descuento y el último entre los mejores supermercados de EE.UU. el año pasado en satisfacción del cliente, de acuerdo con un informe del Índice de Satisfacción del Cliente de EE.UU. de febrero de 2019. El informe señala que una de las principales razones de la mala atención al cliente en el sector minorista es la mayor rotación de empleados, ya que los trabajadores más experimentados y mejor cualificados encuentran trabajos en otras empresas, mejor remunerados.
Walmart es el empleador privado más grande del mundo, y la familia Walton (donantes de Trump), propietaria de la compañía, tiene más riqueza que el 43% de los estadounidenses juntos. Mientras que el minorista gana 16.000 millones de dólares al año en ganancias, paga salarios de pobreza y muchos de sus trabajadores tienen que depender de programas públicos, como los cupones de alimentos, para sobrevivir. Y les han bajado los impuestos. Aún, hay más. Imagínese si tardase 1.000 años en ganar lo que gana su director general en sólo un año. Lamentablemente, no tenemos que imaginarlo. Es la realidad en compañías como The Gap, Disney y Starbucks. Un empleado medio de Walmart ganó poco menos de 22.000 dólares el año pasado. Mientras tanto, el director ejecutivo Doug McMillon ganó 23,6 millones de dólares, es decir, 1.072 años le costaría a un trabajador medio de Walmart ganar lo que gana en un año, su director principal.
Ante el escandaloso diferencial de ganancias entre ejecutivos y trabajadores de la misma compañía, el senador Bernie Sander y los representantes Barbara Lee y Rashida Tlaib presentaron la Tax Excessive CEO Pay Act.
Con ella, aumentaría la tasa del impuesto de sociedades para cualquier empresa que pague a su ejecutivo 50 veces más que a sus trabajadores típicos, comenzando con un impuesto del 0,5%. Los peores infractores, las compañías que pagan a su director (CEO) más de 500 veces lo que pagan a un trabajador promedio, tendrían que pagar impuestos del 5%.
Los salarios de los trabajadores se han estancado en gran medida desde la década de 1970, mientras que el 1% más alto ha duplicado con creces su participación en los ingresos de la nación. Y los ejecutivos corporativos y bancarios constituyen cerca de 2/3 de los principales 1% de los hogares de Estados Unidos. Es hora de que dejen de acaparar la riqueza.
Es hora de pagar impuestos excesivos a los directores o gerentes.
Es hora de que las empresas compartan la riqueza con sus trabajadores, no sólo con el CEO. La Ley de Pago Excesivo de Impuestos a los Directores Generales incentivará los salarios dignos y frenará la desigualdad.
Por lo tanto, únase a nosotros para enviarle al CEO de Walmart una tarjeta de "No, gracias" este año. Teclea este tweet @Walmart:
